«La vocación del alma» y «El descenso» - Leopoldo Marechal (1900-1970)

La vocación del alma En el Banquete , después de considerar la fase negativa del amor y su paso de menesteroso que lo conduce a la belleza y al bien que no posee, Sócrates es interrogado por Diotima: –El que ama lo bello, ¿qué busca en realidad? –Que lo bello le pertenezca –responde Sócrates. –¿Y qué será del hombre, una vez que posea lo bello? En este punto Sócrates guarda un silencio dubitativo. Pero Diotima, que conoce bien la naturaleza moral de su alumno, trueca lo bello por lo bueno y repite su interrogatorio: –El que ama lo bueno, ¿qué busca en realidad? –Que lo bueno le pertenezca. –¿Y qué será del hombre, una vez que posea lo bueno? –Ese hombre será feliz –declara Sócrates ya seguro. Pero más adelante observará Diotima que no basta poseer lo bueno para ser feliz: es necesario, además, poseerlo para siempre , sin lo cual no sería el hombre cabalmente dichoso. De lo que inferirá luego que «el amor se dirige a la posesión perpetua de lo bueno». Elbiamor, e...